Cómo manejar el dolor después de intentos fallidos de FIV

Cómo superar la desilusión, la pérdida y la curación
Cuando comienzas un ciclo de FIV, abres tu corazón a las posibilidades. Inyectas hormonas con esperanza. Esperas las llamadas de laboratorio como si fueran salvavidas. Visualizas los embriones, las transferencias y los hitos futuros. Por eso, cuando no funciona (cuando ese ciclo termina con un «no» en lugar de un «sí»), el dolor puede resultar abrumador. Esto no es solo una decepción. Esto es una verdadera pérdida. Y se merece un cuidado real. En Reproductive Centers of America (RCA), hemos acompañado a innumerables pacientes en el terreno emocional de la FIV. Esto es lo que hemos aprendido sobre la curación después de un intento fallido y cómo seguir adelante con compasión por uno mismo.
Por qué duele tanto
Un ciclo de FIV fallido puede parecer lo siguiente:
- La pérdida de un sueño que has estado alimentando durante meses o años
- La pérdida de control sobre su cuerpo y su futuro
- La reaparición de traumatismos de infertilidad pasados
- Agotamiento físico y agotamiento hormonal
- Aislamiento emocional, incluso de personas que tienen buenas intenciones
Este dolor tiene varias capas. Es válido. Y su procesamiento puede llevar tiempo.
Date permiso para sentir
No hay una «forma correcta» de reaccionar. Es posible que se sienta adormecido, devastado, enojado o incluso confundido acerca de si debe volver a intentarlo. Algunas personas necesitan espacio para llorar. Otras necesitan distracciones. Sea cual sea tu respuesta, deja que sea tuya, sin sentirte culpable.
Se le permite:
- Di no a los baby showers, a los eventos familiares o a iniciar conversaciones
- Llora por un embrión que nunca conociste
- Siéntete esperanzado un día y desesperado al siguiente
- Tómate un descanso antes de decidir lo que sigue
Maneras prácticas de hacer frente
Hable con alguien que lo entienda
Un consejero de fertilidad o un terapeuta especializado en traumatismos reproductivos puede ayudarte a superar la agobiante situación. No tienes que cargar con esto solo.
Escribe el viaje en un diario
Escribe una carta a tu embrión. O para ti misma. O a la versión tuya que inició este ciclo llena de esperanza. Las palabras ayudan a liberar lo que no siempre se puede decir en voz alta.
Reconecta con tu cuerpo
La FIV puede hacer que te sientas como un proyecto científico. Pruebe con movimientos suaves, masajes, acupuntura o cualquier otra cosa que lo haga sentir completo nuevamente.
Revisa tu «por qué»
Esto no significa apresurarse a dar el siguiente paso. Pero recuerda cuál es tu razón más profunda: ser padre, sentir paz o vivir con intención.
Tenga cuidado con la esperanza, pero no la abandone
La esperanza puede parecer peligrosa ahora mismo. Está bien. Guárdalo con cuidado. Estará ahí cuando estés listo para volver a buscarlo.
No eres un fracaso
Un fracaso de la FIV no es vuestro fracaso. Es el fracaso de un proceso a la hora de producir lo que tanto esperabas. Tu fuerza, amor y anhelo aún importan. Y tú también.
Cómo puede ayudarle RCA
En RCA, ofrecemos:
- Consultas posteriores al ciclo con honestidad y claridad
- Apoyo emocional a través de terapeutas autorizados y entrenadores de fertilidad
- Planificación transparente siempre y cuando esté listo para volver a intentarlo
- Un lugar donde el dolor no se oculta, sino que se honra
Ya sea que regrese el mes que viene o el año que viene, estamos aquí. Y recordamos que esto no era «solo un ciclo». Lo era vuestro historia.
Por qué duele tanto
Un ciclo de FIV fallido puede parecer lo siguiente:
- La pérdida de un sueño que has estado alimentando durante meses o años
- La pérdida de control sobre su cuerpo y su futuro
- La reaparición de traumatismos de infertilidad pasados
- Agotamiento físico y agotamiento hormonal
- Aislamiento emocional, incluso de personas que tienen buenas intenciones
Este dolor tiene varias capas. Es válido. Y su procesamiento puede llevar tiempo.
Date permiso para sentir
No hay una «forma correcta» de reaccionar. Es posible que se sienta adormecido, devastado, enojado o incluso confundido acerca de si debe volver a intentarlo. Algunas personas necesitan espacio para llorar. Otras necesitan distracciones. Sea cual sea tu respuesta, deja que sea tuya, sin sentirte culpable.
Se le permite:
- Di no a los baby showers, a los eventos familiares o a iniciar conversaciones
- Llora por un embrión que nunca conociste
- Siéntete esperanzado un día y desesperado al siguiente
- Tómate un descanso antes de decidir lo que sigue
Maneras prácticas de hacer frente
Hable con alguien que lo entienda
Un consejero de fertilidad o un terapeuta especializado en traumatismos reproductivos puede ayudarte a superar la agobiante situación. No tienes que cargar con esto solo.
Escribe el viaje en un diario
Escribe una carta a tu embrión. O para ti misma. O a la versión tuya que inició este ciclo llena de esperanza. Las palabras ayudan a liberar lo que no siempre se puede decir en voz alta.
Reconecta con tu cuerpo
La FIV puede hacer que te sientas como un proyecto científico. Pruebe con movimientos suaves, masajes, acupuntura o cualquier otra cosa que lo haga sentir completo nuevamente.
Revisa tu «por qué»
Esto no significa apresurarse a dar el siguiente paso. Pero recuerda cuál es tu razón más profunda: ser padre, sentir paz o vivir con intención.
Tenga cuidado con la esperanza, pero no la abandone
La esperanza puede parecer peligrosa ahora mismo. Está bien. Guárdalo con cuidado. Estará ahí cuando estés listo para volver a buscarlo.
No eres un fracaso
Un fracaso de la FIV no es vuestro fracaso. Es el fracaso de un proceso a la hora de producir lo que tanto esperabas. Tu fuerza, amor y anhelo aún importan. Y tú también.
Cómo puede ayudarle RCA
En RCA, ofrecemos:
- Consultas posteriores al ciclo con honestidad y claridad
- Apoyo emocional a través de terapeutas autorizados y entrenadores de fertilidad
- Planificación transparente siempre y cuando esté listo para volver a intentarlo
- Un lugar donde el dolor no se oculta, sino que se honra
Ya sea que regrese el mes que viene o el año que viene, estamos aquí. Y recordamos que esto no era «solo un ciclo». Lo era vuestro historia.